"Los porros me rompieron los dientes" El nacimiento de una idea

Rebeca Boligoma

 

 

 

“Los porros me rompieron los dientes” Eso decía el mensaje que me paralizó hace 3 años. El remitente era Karl, quien ahora es fundador de La Molocha y a quien tengo el honor de nombrar amigo y compañero de lucha. Pero no nos adelantemos.

 

Aquel 3 de septiembre salí corriendo del trabajo, entré al metro con un nudo en el estómago y mientras el tren avanzaba las escasas 5 estaciones que me separaban de Ciudad Universitaria, entré a facebook tratando de averiguar qué había pasado.

 Lo primero que vi fue la transmisión en vivo de un compañero. En el video se podía ver a un grupo de jóvenes que descendían  las escaleras que se encuentran a un costado de la torre de Rectoría. Entre los gritos alcancé a escuchar que decían “Todavía hay compañeros arriba” refiriéndose a la explanada. Se escucharon detonaciones, gritos, se alcanzó a ver fuego “Siguen aventando molochas” y ahí se cortó el video. 

El metro llegó a la estación Copilco, se abrieron las puertas y corrí. PERMISOAUN LADONECESITOPASAR, subí las escaleras y corrí más. Sentía que el camino era interminable. Cuando llegué a las islas me detuve a leer el mensaje de Karl “Estamos en los servicios médicos” ¿Cómo que estamos? ¿A quién más golpearon? 

Guardé el celular y continué la carrera, llegué a urgencias con el corazón agitado y el estómago apachurrado. En la entrada encontré a otras compañeras y compañeros de la facultad, dijeron que Karl estaba bien, una de ellas me abrazó y entre angustias ni siquiera alcancé a preguntarles qué había pasado. 

 

Fotografía de Diego Uriarte

Entré a la sala de urgencias y al preguntarle a las enfermeras donde estaba Karl, no pude evitar que se me quebrara la voz. Me dijeron que lo estaban atendiendo y que podía esperarlo. Me senté, respiré, me tranquilicé y pensé en cual tenía que ser nuestro siguiente paso ahora que sabía que Karl estaba siendo atendido.

En ese momento, llamé a algunos amigues. Me dijeron que en la Facultad ya se estaban organizando y que nos esperaban. 

Cuando Karl salió decidimos que debíamos levantar una denuncia en el MP de CU, pero antes, fuimos a la Facultad para pensar junto a nuestros compañeros y compañeras, la respuesta ante la agresión. 

Ese día y como de costumbre, Karl vestía una de sus características playeras blancas, misma que quedó ensangrentada. Le dolía el cuerpo y la cara por los múltiples golpes y patadas que recibió, sin embargo, no podíamos y no queríamos dejar pasar más tiempo sin emitir una respuesta frente al ataque vivido.

Así que decidimos grabar una entrevista con mi celular. Él se acomodó en la entrada de la biblioteca de la Facultad y comenzó a narrar los hechos tal cual los vivió mientras yo documentaba ,a través de la cámara del celular, todas y cada una de sus palabras. En ese momento no lo sabíamos pero ese era el inicio de este medio de comunicación independiente llamado La Molocha.

Aquella entrevista fue documentada por muchas otras personas, pues al poco tiempo de que comenzamos a grabar, más gente se acercó a escuchar lo que  Karl denunciaba.

Ese día se definieron las acciones siguientes para forzar a la Universidad a tener una respuesta frente al ataque del que nuestros compañeros habían sido víctimas.

En la noche, al estar a salvo en casa, hicimos el recuento de lo que había pasado y comenzamos a reunir toda la información que circulaba en redes. Videos, fotos, publicaciones, TODO. Para las 12 de la noche ya se tenía ubicados a la mayoría de los atacantes, las y los compañeros se organizaron y encontraron los facebooks personales, fotos y nombres. Nosotros guardamos esa información. También guardamos las fotografías publicadas por Diego Uriarte, en las que se podía ver claramente el momento en que 8 sujetos atacan a Karl. Casi todo estaba documentado. Se podía ver a varios porros prendiendo y aventando bombas molotovs para incendiar a quienes se encontraban a su alrededor. Muchos traían palos y objetos para golpear a los universitarios.

Asimismo, Uriarte hizo pública la fotografía donde un individuo patea con todas sus fuerzas la cara de Karl. 

 

Fotografía de Diego Uriarte

 

Esa noche no dormimos para recopilar toda la información posible pues sabíamos que podía servir para la investigación del MP. Esa era la primera investigación que realizamos quienes ahora conformamos el equipo de La Molocha. 

A la mañana siguiente leímos las portadas de los periódicos sobre lo ocurrido el 3 de septiembre del 2018. Fue decepcionante más no sorprendente leer que habían distorsionado por completo lo que pasó. 

Con información escueta, criminalizaron a las víctimas de ataque. Dijeron que había sido una trifulca, dando a entender que eran dos grupos enfrentados, cuando todas y todos sabíamos que era un ATAQUE. El grupo porril había prendido fuego a las cosas de los universitarios, les robaron las pertenencias, los golpearon, patearon e incluso picaron a más de uno, sin que los universitarios pudieran hacer nada más, que correr. 

Los medios de comunicación se cansaron de esparcir mentiras, sin darse siquiera el tiempo de investigar, siendo que las fotografías y videos de lo que había ocurrido circulaban en internet. 

A los pocos días del ataque, después de la Mega Marcha en Ciudad Universitaria, con el cansancio sobre los hombros y el agotamiento en el cuerpo, Karl me dijo que había creado una página donde publicaría lo que había sucedido. 

“ Podemos publicar la verdad, lo que realmente pasó, sin mentiras. Será un medio de comunicación, nuestro medio.” 

Y en un ejercicio de resignificación lo nombró La Molocha.

En la página lo primero que publicamos fue la verdadera versión de los hechos. Utilizamos la información recabada para denunciar el sesgo conservador y criminalizante de los grandes medios de comunicación. 

La Izquierda Diario

Al principio ese era nuestro objetivo principal, nos centramos en lo ocurrido en la explanada de Rectoría ese 3 de septiembre. Pero después, con el paso del tiempo definimos el eje rector de La Molocha. Nos propusimos construir un medio de comunicación independiente con perspectiva de derechos humanos. 

El 3 de septiembre fue un día horrible para Karl, para su familia, sus amigues y para mí, pero él logró canalizar su rabia y compartirnos la idea que le dio vida a este Medio. 

Así que a tres años del nacimiento de La Molocha, me complace escribir que seguimos creciendo como Medio y como equipo. Nos hemos aventurado a contar las historias de las y los desamparados tal y como nos las narran. Nos hemos acercado a las personas que han sido víctimas de violencia para que la plataforma que nosotros construimos les sirva para que sus voces se escuchen.

Somos jóvenes conscientes de la violencia que se vive en nuestra realidad y hacemos el esfuerzo por generar acciones para erradicarla. 

Somos jóvenes cansadxs de la desigualdad que se vive en esta latitud, hartxs del adultocentrismo de quienes gobiernan y asqueados del pseudo periodismo de quienes en lugar de visibilizar lo que vivimos, deciden venderse al mejor postor. 

Somos jóvenes defensores de derechos humanos y le apostamos a canalizar la rabia que sentimos frente a tanta injusticia, para construir desde el cariño y el humanismo para así, abonar a la transformación y mejoría de nuestro entorno.

Somos jóvenes y somos el Equipo de La Molocha.